En instantes de vacuidad... tras años de inconmensurables pulsaciones de un incorpóreo pero agobiante hormigueo que saturaba los rincones de los filamentos... como una irritación sofocante...como un escozor incisivo... como si existieran millones pulsantes y diminutas agujas causando un infinito daño desde la profundidad de la brea que compone la negrura, con cierto almizcle tóxico con olor a ira, con sabor ácido y textura de amargura... florecen con hermoso horror... como trozos afilados del ser que se han reacomodado en las más insolentes esquinas de vértices sin espacio ni tiempo...como un tic tac insoportable que presiona las paredes de la distante y extraña casa que habitan aquellos espectros gestados en la matríz del sopor... sumidos en su penumbra... y todas las multimorfas sensaciones se aglutinan... se congregan... en atemporales instantes de vacuidad... donde se comprenden las formas de la tortura, tan sutiles como potentes... tan propias como desconocidas, siempre resguardando un pequeño instante de completo descuido para atacar furtivamente, y poseer desde las rígidas osamentas hasta las trémulas carnes de irrefrenables apetitos...
Es como una infausta capa densa que recubre desde las falanges hasta el más ignorado de los poros... y tras su gélido abrigo el regalo del absurdo se muestra con su absoluta magnificencia... la tersa caricia del desconcierto y su beso de eléctrico terciopelo...
En instantes de vacuidad colma de voces y pesadillas los vórtices, revelando con la sombra el rostro desconocido... es la fiera, el salvaje caos... la dicotomía negada... las fauces puntiagudas sonrientes del abismo ilimitado...tan inagotable como el apetito mismo... y en la mirada que te mira encuentras una vía al portal de las vilezas inimaginables...
Infame, indómito, irracional, carnal... de oscenas y perversas muecas sonríe como una bestia contenida en la oscuridad...
¿Cómo has podido ignorarle cuando susurra con bramidos de espeluznante estruendo?...
Es en instantes de vacuidad cuando eso resurge y brinda calma al salir de su prisión, cuando eso escapa del inconsciente y de la mirada temerosa de quienes se han alejado... cuando la cosa extiende sus gigantes y estropeadas alas para acomodarse y exhalar sin que puedas hacer aquello que tantos entes hicieron al vislumbrarle... sin que exista un escape...
Alivia comprender que todas las criaturas que osaron acercarse e intentaron calmar al monstruoso esperpento resultaron heridas por sus espinas perennes... se alejaron despavoridas... sensatamente presintieron que era conveniente atacar antes que ser consumidas...
Y sonries pues abrazas al fenómeno de fatua sonrisa, de escamas y púas, de escarlatas vistas y hocico de lobo... sonries pues tan sólo es un animal herido y hambriento que permanece en las tinieblas, y su naturaleza es espantar... su esencia es el horror y la clandestinidad, pues quema como hielo y derrite como fuego, anhela lo que hastía y alarma a quienes seduce pues les aterra...
Dejad pues que el fiero terror amorfo ría... y ríe con él... toma su extraña forma... pues la risa tétrica y repulsiva resonará en los confines de esa nada que lo compone todo, y hará eco en los precipicios de las pesadillas que atormentan a las criaturas que viven lejos del insomnio perpetuo,
Lejos del delirio cíclico al extremo de la ceguera...
En plácidos sueños los ecos distantes sembrarán el pavor y les despertarán a mitad de su paz... y vivirán por breves instantes el infierno, serán hermanos en el vórtice del lamento, y al juntar los gritos cantarán tus himnos.
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GuTs!
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