Terror Abismal Reverbnation

2018-10-17

¿Qué ha sido del vagabundo errante?

--¿Qué ha sido del vagabundo errante preguntas?, ¿Acaso aún resguarda en sus párpados el peso de un mundo invisible?...
--Oooh expectante e inquieto ser, sólo resta para tí evitar tales cuestionamientos, pues podrían turbar tu plácido viaje, trastornar tu locura, inquietar tu vigilia e irrumpir en pesadillas... es irrelevante su destino errático...
--¿Pero por qué me negáis la dicha del conocimiento?...¡Saciad mi sed pues, que es de mi interés recordar al pintoresco mamarracho!...
--¡Está bien, si tanto deseas ahondar en el camino de un futuro reflejo y apresurar tu angustia, torpe y descuidado curioso... atención a mis palabras, pues satisfacción me brindará tu horror próximo, y cuando tus cuencas se muestren ante la sorpresa que evitas alimentarás mi hambre con tu expresión lánguida!...
Si en silencios el arrullo de la inexistente voz hace eco en la atormentada, enmarañada, ensangrentada grieta... ¡en los sueños danza como grácil y volátil algarabía!... y es casi inconcebible... una oda al sin sentido... pues sigue añejándose el licor del que ha sido abandonado en su trágica comedia, un brebaje efervescente y explosivo...un veneno para la cruel fiesta que mantiene al dopado ente... es ese licor que quema al consumirse... pues ante cada excusa y cada púa que resguarda en sus bolsillos, el ácido cítrico adereza en su alquímico fluido incorpóreo el coctel del juglar... su cantar murmurado entre muecas perversas se oye aún, como el ruego del desolado... un canto sin público, un testamento forjado en su destierro... habla al ocaso y a la nada, al reflejo de su anonimato, a la noche y a la negrura de los sueños que se esconden en el desconocimiento... y les pide que envíen a la ajena de binaria nemotecnia aquellas sonrisas y esperanzas que no tiene para sí mismo... y les pide que le brinden aquello que le fué negado... les pide que resguarden sus noches para que no sienta el frío que le congela, y que no permitan que se aleje de su cálido colchón, uno distinto a un placer culposo o un secreto incómodo... uno que disfruta la fortuna de quien es apreciado... y les pide hasta a las esquinas desdibujadas y a las paredes multicolor que le arrullen en las noches cuando su propia voz se ahoga en el bullicio de quien no puede gritar, y en mudos nudos es abrazado por el peso de su cansancio... mientras cae tan muerto como una roca al abismo del océano.
Y es su diaria tortura, un cíclico laberinto... en donde no puede escapar el que desea huir, pues está aprisionado con un monstruo detestable... y es tal su disgusto y hastío...su náusea insoportable... que golpea con ira y asco al motivo de su odio, sin comprender que al hacerlo, ciegamente intenta alcanzar a una sombra, danzando como un desquiciado el baile de quien enfrenta batallas quijotescas en infiernos infinitos, como ofrendas de muertos para seres vivos.
--¿Dime ahora, desaliñado joven si tu antigua carga se ha aligerado?...¿estás preparado para festejar otra noche en este antro, sonriendo antes de dispararte al precipicio nuevamente?... ¿Recordarás mañana que ya habías preguntado por tu destino justo antes de perder la cordura nuevamente?...¿Recordarás mañana esta voz cuando me desvanezca en el salvaje ritmo de tu suicida locura?
--¿Qué tanto mascullas amigo?, tu voz es distante e incomprensible... ¡cuida esa apariencia!, pareces un tanto borroso...deja de jugar y cuéntame con prontitud... ¿Qué ha sido del vagabundo errante? ¿Acaso aún resguarda en sus párpados el peso de un mundo invisible?...

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GuTs!

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